Sociedad, búsquedas y expectativas: cuando el ciudadano vive en una novedad constante

Un cartel en el que se lee Human Being Human

¿Sientes presión por estar al día con las noticias, las tendencias o los temas del momento? ¿Con qué frecuencia te permites aburrirte? ¿Tienes la sensación de que “lo nuevo” deja de ser nuevo demasiado pronto? 

No pretendemos dar respuestas cerradas, sino invitar a las personas a hacerse más preguntas sobre aquello que ven y provocar un pensamiento crítico. 

IN REAL LIFE es un proyecto de Arena, que nació a principios del 2024, en el que buscamos entender cómo los medios configuran la realidad en la que vivimos para comprender cómo hemos llegado hasta aquí. En este sexto y último capítulo, junto con el laboratorio de investigación cultural Célula Lab, exploramos cómo vivimos en un mundo donde todo puede mostrarse y editarse y donde las personas hemos aprendido a construir nuestra identidad según las reglas de lo mediático, buscando atención, novedad y aprobación. Pero, en medio de esta sobreexposición, ¿dónde queda la esencia humana? 

Vaclav Havel, dramaturgo y posteriormente primer presidente democrático de la República Checa, retrató en 1963 algo similar a lo que estamos viviendo ahora. En su obra de teatro “Una fiesta en el jardín” critica a una sociedad donde la burocracia y el protocolo supera el sentido común y somete a las personas a la despersonalización y la alineación. Con esta obra destaca lo fácil que puede llegar a ser que las personas pierdan su autenticidad e identidad, llegando a ser absorbidas por un sistema que valora las apariencias y los procesos muy por encima de la esencia humana. 

Joseph Brodsky, en su discurso “Elogio al aburrimiento” de 1989, completaba esa idea desde otro ángulo:

Havel y Brodsky, sin coincidir en la misma época, advertían de la misma amenaza: la renuncia a nosotros mismos en nombre de lo nuevo o de lo que sigue. 

Hoy, la omnipresencia mediática ha convertido la actualización constante en aspiración cultural. No solo queremos consumir lo último, también queremos producirlo, contarlo y mostrarlo. Nuestra identidad se edita y reedita en tiempo real como si fuéramos versiones beta eternas de nosotros mismos.

Las experiencias ya no se viven únicamente. Éstas se registran, se optimizan para el algoritmo y se pulen para encajar en la narrativa que toque en ese instante. Las emociones que acompañan esas experiencias se han convertido en una moneda de cambio, y consumir sentimientos como contenido ha hecho que se hable cada vez más del concepto de “obsolescencia emocional”, un desgaste afectivo que hace que lo que antes nos emocionaba deje de tener interés en plazos cada vez más cortos. Así, se impulsa la búsqueda continua de novedades para recargarnos con nuevas emociones. 

Pero ¿qué ocurre cuando la búsqueda infinita de estímulos nunca es suficiente y vacía el sentido de lo que experimentamos? Cuando la ansiedad por descubrir lo nuevo pesa más que el descanso o cuando consumir de forma inmediata y acelerada impide comprender o asimilar la realidad. 

En medio de esta saturación, surgen señales de resistencia cultural. La llamada “revolución silenciosa” de la Gen Z, donde crece el interés por los llamados “dumb phones”. Menos pantallas, menos notificaciones, menos tentación de vivir para los demás y más intento de recuperar la experiencia sin filtro. Este fenómeno forma parte de movimientos más amplios como el minimalismo digital, el slow living y la desconexión consciente, donde se prioriza la atención plena y la conexión real con lo que nos rodea. 

En este momento, aburrirse puede ser un acto de rebeldía. Pensar sin ningún estímulo externo puede ser un lujo. ¿Cuándo fue la última vez que soñaste despierto? Esperar sin tener que refrescar una pantalla, porque quizás lo nuevo no siempre está fuera. Tal vez lo nuevo sea volver a ocupar el tiempo sin prisas y la vida sin comparación o sin tanto escaparate. 

El objetivo de Arena es seguir explorando estas “nuevas realidades”, porque a veces observar desde el silencio enseña y revela más que cualquier tendencia. 

Quizá la clave esté en redescubrir lo que siempre ha estado allí. Explorar el aburrimiento como espacio fértil, recuperar la curiosidad que nace sin estímulos externos o reafirmar una identidad que no necesita ser compartida para existir. 

Sobre Arena Media

Compañía líder en comunicación integrada y medios, con más de 20 años de trayectoria. Es la única agencia de medios española en el top 50 de los rankings WARC Media 100 y WARC Effective 100 de 2024. Arena destaca por su actitud para explorar, acelerar y provocar conexiones únicas y relevantes entre marcas y personas para generar un impacto positivo en sus vidas, su negocio y la sociedad.