Emprendedor no se nace, se aprende

  • También hay dueños de start-ups que han encontrado la felicidad gracias a sus proyectos
  • Emprender también enseña a delegar y relativizar el estrés
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“He aprendido a delegar y relativizar todo el estrés que se soporta emprendiendo”. Este es el mayor aprendizaje que ha conseguido Pablo Samaranch, Co-founder & CEO de Apeteat, durante su experiencia creando esta start-up de envío de comida a domicilio.

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Una experiencia que ha compartido con todos los participantes en la tertulia “El éxito de emprender”, organizada por Reason Why con el apoyo de Estrella Galicia.

Emprender para ser feliz

Emprendiendo también se aprende a encontrar la ilusión por trabajar en algo que realmente te motiva y te hace feliz como en el caso de Cristina Aristoy, Co-founder y Responsable de Operaciones en Singularu; y, en algunos casos el hecho de emprender incluso llega a generar cierta sensación de estar desaprovechando el tiempo cuando no se lo estás dedicando a la empresa.

Emprender puede servir para encontrar la felicidad

Montar una compañía desde cero también sirve para desarrollar habilidades personales desconocidas y valorar más a los antiguos jefes según ha relatado María Martín, Co-fundadora de Tiendeo, hablando de su propia experiencia. Y para Pablo Fernández, Co-founder de Clicars “cuando montas una start-up valoras el mérito que tiene hacer crecer una gran empresa”.

>> Más información sobre emprendimiento

En definitiva, lo más importante a tener en cuenta durante este largo, y a veces tedioso camino hacia el emprendimiento, es celebrar cada éxito y creer en la idea. “Los logros son los que te dan la energía para seguir avanzando”, ha apuntado Juan José Delgado, Chief Digital Officer en Hijos de Rivera. Algo a lo que Rafael Gozalo, Co-fundador y Co-CEO de The Power MBA, ha añadido: “Cree en ti, sigue tu instinto y sé valiente”.

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