Desde la aparición del coronavirus, la higiene pública ha adquirido una importancia vital para la sociedad a nivel mundial. Las organizaciones gubernamentales y sanitarias insisten en recalcar la necesidad de seguir pautas de precaución que ayuden a contener la propagación del virus. Una filosofía que involucra de manera directa cualquier actividad comercial, y más si ésta se realiza de cara al público.

Las ventas de desinfectantes para manos y jabones antibacterianos se han disparado desde el inicio de la pandemia, pero la desinfección es más compleja en espacios compartidos, especialmente si son reducidos y no se puede disponer del personal necesario para una protección constante.

Por ello, la agencia Geometry (perteneciente al grupo WPP) ha reactivado la producción de un gel desinfectante que creó en 2015 junto a Lifebuoy (marca de Unilever). Este producto permite implementar una respuesta segura ante el COVID-19 mediante su aplicación en el asa de un carro de la compra. Y es que elimina el 99,9% de los gérmenes y además realiza la desinfección de forma automática.

"En Geometry estamos ayudando a reinventar el comercio con un cambio sin precedentes que ayude al sector minorista. Una implementación de soluciones higiénicas sostenibles para entornos comerciales en todo el mundo", explica Nick Walsh, CEO de Geometry Middle East&North Africa.

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El producto pretende ayudar reducir el riesgo de contagio y mejorar la confianza del consumidor a la hora de acudir a los supermercados y otros comercios. “La venta minorista física ha sido un héroe desconocido durante esta pandemia. A pesar de la abundancia de predicciones comerciales sobre su muerte, las tiendas de alimentación, las farmacias y muchas otras tiendas físicas se han considerado negocios esenciales”, defiende Beth Ann Kaminkow, CEO Global de Geometry. “Mantener abiertos los comercios locales ha permitido a los consumidores acceder a sus necesidades y a un poco de normalidad”.

Kaminkow considera que, a medida que los países comiencen a levantar las restricciones públicas, las medidas de higiene sostenibles se convertirán en “requisitos necesarios para un futuro sostenible”.

Rodeados de bacterias

Un estudio realizado por la Universidad de Arizona confirma que el asa de un carro de la compra contiene alrededor de un millón de bacterias. Sin duda, el coronavirus marcará un punto de inflexión en los protocolos de higiene mundiales e influirá de forma determinante en la nueva normalidad comercial.

Según otro estudio de YouGov, más del 60% de los compradores en todo el mundo evitan tocar objetos. GlobalWebIndex estipula que el 50% de los consumidores intentan permanecer el menor tiempo posible dentro de las tiendas. También la consultora de medios Nielsen ha hecho hincapié en la necesidad de una transparencia completa en la cadena de suministro y en relación a las medidas de salud y seguridad adoptadas por los minoristas.

“Nuestra misión en este momento es apoyar a los minoristas, marcas y compradores durante este momento difícil, y nos hemos movido rápidamente para reiniciar la producción de Handle on Hygiene, al tiempo que reducimos drásticamente el precio unitario para garantizar que llegue a todo el mundo", asegura Nick Walsh (Geometry).

Geometry ha entregado muestras y herramientas de medición en más de 25 mercados a nivel mundial. Además, desde la compañía defienden que este producto se puede utilizar también en carritos de aeropuerto, asideros del transporte público y muchas otras barandillas con un contacto frecuente.