Las influencias en las decisiones del consumidor: de los creadores de contenido a la preocupación por la salud

  • Warc ha identificado cinco grandes tendencias que marcarán las decisiones de compra a lo largo del próximo año
  • Destaca la influencia creciente de los creadores y el impacto de la IA en la relación con las marcas

El incremento del coste de la vida, la economía de los influencers y la creación de contenidos o la inteligencia artificial son algunos de los factores que están impactando en las decisiones de compra y gasto de los consumidores, según un nuevo informe de tendencias de Warc. 

La consultora ha explorado el comportamiento de los usuarios y recoge las conclusiones en el estudio "2025 Global Consumer Trends". Éste se apoya en análisis de Warc y también en investigaciones y encuestas realizadas por GWI en 54 mercados diferentes a lo largo de los últimos meses. Así, ha identificado cinco grandes tendencias que afectarán al consumo de las diversas categorías y a la elección de las marcas a lo largo del próximo año. 

Los consumidores son más conscientes de sus gastos y están asumiendo mayor control sobre sus decisiones

El informe traslada el impacto del persistente clima de incertidumbre económica e imprevisibilidad ante las políticas arancelarias en los consumidores, de los que señala se están volviendo más conscientes de sus gastos y asumiendo un mayor sobre la forma en que consumen información, gestionan su bienestar o se conectan con los demás.

Estas son las cinco grandes tendencias en el comportamiento de los consumidores, según el  "2025 Global Consumer Trends" de Warc: 

El coste de la vida impulsa la marca blanca

La situación de inflación y elevado coste de la vida están polarizando el poder adquisitivo y aumentando la brecha de riqueza, lo que deriva en una divergencia en los hábitos de consumo. Y los aranceles podrían acelerar la tendencia a medida que impactan negativamente en el empleo de los sectores que dependen de las importaciones. 

En este sentido, se observa un aumento de la popularidad de los productos de marca blanca, o que refleja la disposición de los consumidores a cambiar de marca para obtener una mejor relación calidad-precio. Según datos de GWI, el 55% de los hogares de bajos ingresos a nivel mundial afirmaron preferir pagar menos por un producto de marca blanca más económico que pagar más por una marca de fabricante. 

Es por ello que algunas empresas están comenzando a bifurcar sus ofertas para atender tanto a hogares de bajos ingresos como a hogares ricos. No obstante, las empresas también pueden responder a la situación reevaluando su público objetivo y ajustando las estrategias de precios para adaptarlas a los cambios de demanda. Del mismo modo, también se pueden reevaluar las propuestas de valor para los distintos segmentos y alinear las comunicaciones en consecuencia. 

Credibilidad de los creadores de contenido

La atención del consumidor, especialmente las nuevas generaciones, se está desplazando de los medios tradicionales a los no tradicionales, y creadores de contenido e influencers en redes sociales ganan terreno, tanto como fuentes de recomendación como fuerzas de impacto en las decisiones de compra. 

Según el informe de Warc, el 47% de los usuarios de redes sociales aseguran haber realizado compras durante el último año basándose en las recomendaciones de influencers, y destacando la confianza en estos como un factor clave de la decisión. 

Esto debe animar a los profesionales del marketing a explorar colaboraciones con creadores y aprovechar sus opiniones individuales, así como su alcance y reputación. Los creadores e influencers deben formar parte del mix de medios para hacer llegar sus mensajes a sus audiencias, velando siempre por la seguridad de marca. 

Adopción de la IA

La inteligencia artificial ya forma parte del día a día de los consumidores, y se espera que la generalización de los agentes de IA podrán transformar la forma en que las personas interactúan con las marcas, puesto que podrán tomar decisiones por ellos y realizar algunas tareas de forma autónoma. 

Aludiendo a datos de Salesforce de finales del año pasado, el análisis de la consultora señala que el 39% de los consumidores estadounidenses se sienten cómodos con la programación de citas por parte de agentes de IA; mientras que el 24% se sienten cómodos con que sean los agentes de IA los que realicen sus compras. 

Esto obligará a las marcas a reforzar su propuesta en torno al contacto humano como fórmula para diferenciarse de la tecnología y promover la conexión y la empatía para impulsar la interacción de los clientes. Es precisamente esa conexión el factor más destacado en la diferencia entre la relación con los humanos y la IA. 

La preocupación por la salud

Los avances tecnológicos en el terreno de la salud y la preocupación por la misma están empujando a los consumidores a adoptar mayor control sobre su salud, con especial interés en la medicina preventiva y el envejecimiento. Es por ello que los usuarios están destinando cada vez más presupuesto a productos como vitaminas, suplementos o bebidas funcionales, y alejándose de alimentos ultraprocesados. 

A este respecto, la consultora señala que los profesionales de marketing pueden responder destacando los beneficios nutricionales de sus productos, empleando para ello el etiquetado del packaging o las comunicaciones, poniendo el foco en su papel en un estilo de vida equilibrado. 

La alimentación es una de las categorías que más impactada se está viendo por esta tendencia, y puede encontrar en la innovación una gran aliada. Así, el desarrollo de alternativas saludables a los productos tradicionales y la presentación de éstas como vinculadas al disfrute y la indulgencia es una vía para navegar el contexto. 

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El fomento de la conexión social

Tras unos años marcados intensamente por la interacción virtual, los consumidores valoran cada vez más la conexión humana y el tiempo que pasan de forma presencial con otras personas. Esto está provocando el aumento de la preferencia por actividades significativas, como festivales, y el auge de iniciativas, tanto online como offline, que impliquen a una comunidad en torno a intereses concretos, como el deporte o el bienestar. 

Además, a tenor del incremento del coste de la vida, muchos consumidores están decantándose por alternativas al ocio nocturno tradicional. Así, apuestan por las veladas de juegos de mesa. Datos de GWI señalan que el 50% de millennials y generación Z juegan a juegos de mesa al menos una vez al mes. 

Hay oportunidades en esta tendencia para las marcas. Principalmente, la creación de espacios y momentos de conexión mediante activaciones experienciales. También la identificación de nuevos puntos de contacto para ayudar a impulsar la visibilidad y la disponibilidad mental de la marca.