“Hablemos de obesidad. Hablemos sin filtros”.
Es el mensaje que a lo largo de los últimos días está trasladando la farmecéutica Novo Nordisk, fabricante del medicamento contra la obesidad y la diabetes Ozempic, a través de una campaña de publicidad. En ella afirma que “la obesidad es una enfermedad” y que “la obesidad puede matar”, mensajes que, tanto en su contenido, como en su forma, han generado controversia y conversación entre los ciudadanos.
Multitud de marquesinas en el centro de Madrid han mostrado las afirmaciones. Con gráficas estéticamente minimalistas, protagonizadas principalmente por el copy, la compañía expone: “la obesidad es un problema de salud, no de estética. Y sigue expandiéndose mientras discutimos cómo hablar de ella”; y “cada año mueren más de 4 millones de personas por la obesidad. Y sigue expandiéndose mientras discutimos cómo hablar de ello”.
Ambas piezas están encabezadas por la frase “Contenido sin filtros. Este contenido es extremadamente delicado y puede herir sensibilidades”. En la parte inferior incluyen el logotipo de Novo Nordisk, así como el de distintas instituciones y organizaciones que avalan el mensaje, como Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO), Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG) o Asociación Nacional de Personas que viven con Obesidad (ANPO).
En el sitio web de la iniciativa, Novo Nordisk amplía su discurso. Apunta que la conversación en torno a la obesidad está cargada de filtros que, para no herir sensibilidades, ofrecen una realidad distorsionada que aleja a las personas de la toma de decisiones acertadas para la salud. “Es necesario eliminar estos filtros porque la obesidad no necesita protección, necesita verdad y que se genere conocimiento basado en evidencia para actuar frente a ella”, señala la compañía.
Apunta también que, además de las organizaciones que avalan la campaña, nadie como Novo Nordisk, “una compañía comprometida en su prevención, investigación de tratamientos y concienciación social, para sensibilizar sobre la importancia de romper esta dinámica”. Explica que la plataforma Obesidad Sin Filtros busca generar conocimiento social y evolucionar la conversación de una manera valiente y sin filtros.
“Sabemos que hablar sin filtros de la obesidad no es fácil, pero merece la pena hacerlo”
“Sabemos que hablar sin filtros de la obesidad no es fácil, pero merece la pena hacerlo. La solución frente a ella, como frente a cualquier otra enfermedad crónica, es la atención médica. ¿Has pensado en dar el paso y hablar con un especialista?”, concluye el manifiesto.
La campaña de publicidad exterior se acompaña de una pieza audiovisual compartida en redes sociales. Simula un concurso en el que el presentador cuestiona a la concursante sobre la obesidad. A la pregunta qué aumenta con la obesidad ella responde con “la capacidad de autoaceptación”, y el presentador añade que también aumenta el riesgo cardíaco”. A la pregunta ¿hablar de obesidad es hablar de…?", ella responde “diversidad” y él “salud”. La concursante reflexiona sobre “no poder jugar con mis hijos”, “sentir vergüenza cuando como delante de los demás” y termina señalando que “la obesidad es una enfermedad”.
Críticas y el debate body-positive
En redes sociales, la campaña ha cosechado opiniones encontradas, aunque la mayoría critican el mensaje de la compañía. Lo consideran de “horrible”, “perverso”, de “mal gusto”, y especialmente señalan que hay una intención comercial por parte de Novo Nordisk de promocionar su producto contra la obesidad.
La campaña ha reavivado el debate en torno a la percepción social de la obesidad, los movimientos contra la gordofobia y de body positivity. “La campaña es una indecencia: usa el estilo antiwoke de “vamos a hablar de este problema que los woke llaman respeto por el cuerpo ajeno”; saca a una mujer joven, su target, y todo con la excusa de luchar contra la enfermedad de la obesidad, porque la publicidad dirigida al público en general de los medicamentos con receta está prohibida”, comenta una usuaria a través de Bluesky.
“Qué asco acabo de sentir como médico por el anuncio gordofóbico que he visto en Cuatro, patrocinado por varias sociedades médicas y laboratorios farmacéuticos. Y todos sabemos por donde van. Nunca les ha preocupado tanto la obesidad”, apunta otra usuaria en la misma plataforma. “La mierda de campaña que han sacado de Obesidad Sin Filtros? Wow”, comenta otro.
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“Gracias por lanzar ésta campaña. Es alucinante que la mayoría de la gente tenga sobrepeso u obesidad y que encima se crean saludables y critiquen duramente a quienes se preocupan por su salud. Hace falta concienciar y dar más difusión a mensajes como éste”, apunta otro en respuesta a Novo Nordisk en Instagram.
Tal y como explican desde Novo Nordisk a Reason.Why, son “conscientes de que se trata de una iniciativa disruptiva que puede provocar reacciones de todo tipo”. Aseguran también que tienen previsto presentarla en los próximos días en un acto que tendrá lugar en Madrid en el que se podrá “escuchar a todas las partes implicadas" y en el que explicarán “las razones que han impulsado su puesta en marcha”.
Respecto a su postura, señalan que “es necesario eliminar los filtros de la conversación en torno a la obesidad porque la obesidad no necesita protección, necesita conocimiento para actuar frente a ella y pedir ayuda médica, como hacemos frente a cualquier otra enfermedad crónica”. Y añaden: "llevamos décadas comprobando que el mejor acompañamiento a las personas con obesidad requiere honestidad y sensibilidad: todo empieza con una conversación honesta sobre su estado de salud y al mismo tiempo sensible con su salud emocional".
En este sentido, tanto Novo Nordisk como las entidades participantes buscan alejar la obesidad de corrientes estéticas o body-positive para que exista una conciencia social real de la importancia de ir al médico. Apuntan también que la plataforma “Obesidad Sin Filtros” es la única que reúne a las entidades con más experiencia en la lucha contra la obesidad de nuestro país para generar conocimiento social en torno a la obesidad.
Algunos usuarios también han criticado la calificación de la obesidad como enfermedad. La Organización Mundial de la Salud (OMS) la considera como tal. Su sitio web expone: “La obesidad es una compleja enfermedad crónica que se define por una acumulación excesiva de grasa que puede ser perjudicial para la salud.” Indica que puede provocar un aumento del riesgo de diabetes de tipo 2 y cardiopatías, afectar la salud ósea y la reproducción y aumenta el riesgo de que aparezcan determinados tipos de cáncer.
Organizaciones cuestionan el posible resultado de la campaña
Tal y como recoge el citado medio, la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO), que ha dado su aval a la campaña, ha señalado que el resultado no era el esperado. Consideran que la campaña de concienciación “tiene que ir por otra línea, no con anuncios así”, y creen que “se va a conseguir todo lo contrario de los que ser quería porque es muy agresivo y violento”. Según El País, la organización se ha reunido con Novo Nordisk para solicitar cambios.
Si bien es cierto que ni la campaña ni la página web a la que dirige mencionan nigún medicamento, aunque sí incluye una calculadora para la autoevaluación basada en el índice cintura-altura (WHtR) y en el índice de masa corporal, siendo éste último un indicador que muchos profesionales consideran desfasado.
En función de los resultados, la herramienta invita a consultar con un médico. “Según los resultados de tus pruebas diagnósticas y tus necesidades, tu proveedor de salud puede recomendarte un plan de reducción de peso o discutir otras opciones de atención contra la obesidad para una gestión del peso a largo plazo”, expone.