En medio de la polémica por el auge de los dispositivos de compañía basados en inteligencia artificial, Heineken ha lanzado una campaña que sirve como contrapeso emocional y cultural al fenómeno. Bajo el claim “The best way to make a friend is over a beer” (La mejor manera de hacer un amigo es con una cerveza), la acción desarrollada por LePub Nueva York se presenta como una defensa de las conexiones auténticas en un momento en que las relaciones humanas parecen cada vez más mediadas por algoritmos, pantallas y simulaciones emocionales.
El mensaje de Heineken llega justo después de la controvertida campaña de la start-up Friend en el metro de Nueva York
El mensaje de Heineken llega justo después de la controvertida campaña de la start-up Friend, que empapeló el metro de Nueva York con anuncios minimalistas para promocionar un wearable de inteligencia artificial diseñado para simular compañía humana. La respuesta ciudadana fue contundente: decenas de carteles vandalizados con frases como “Haz amigos de verdad” o “Esto es vigilancia” dejaron claro el rechazo a lo que muchos perciben como una peligrosa trivialización de la amistad y una amenaza a la privacidad. En lugar de apaciguar la crítica, el propio CEO de Friend, Avi Schiffmann, reconoció que la campaña fue pensada para provocar debate: “Sé que la gente en Nueva York odia la IA”, declaró a Adweek, tras admitir haber invertido buena parte de su presupuesto en los más de 11.000 carteles repartidos por la red de metro.
Consciente del clima cultural, Heineken ha intervenido el espacio público neoyorquino con un mensaje diametralmente opuesto. En lugar de un colgante con micrófonos, la marca propone un wearable mucho más simple y directo: un collar con abridor de botellas. Su función no es registrar datos ni simular emociones, sino facilitar un gesto tan humano como compartir una cerveza con alguien. El claim central se acompaña además de un guiño histórico: “Heineken: Social networking since 1873”.

La campaña -que también se despliega en redes sociales con publicaciones que animan a etiquetar a amigos reales con los que tomar una cerveza- apuesta por el humor y la cercanía para recordar que la verdadera conexión no necesita dispositivos intermediarios. Como explica Jim Curtis, Chief Creative Officer en LePub: “Heineken cree que la mejor forma de hacer amigos sigue siendo con una cerveza real y una persona real. Y muchos neoyorquinos están de acuerdo.”
En esta batalla cultural sobre qué entendemos por conexión humana, Heineken se posiciona del lado de la autenticidad y lo hace con una campaña que, sin confrontación directa, dialoga de forma inteligente con las tensiones sociales actuales. Frente a los colgantes que prometen compañía artificial por 129 dólares, la marca de cerveza recupera el gesto ancestral de compartir una bebida como símbolo de cercanía y conversación real.