Dinamarca busca una mayor protección de los ciudadanos frente a los deepfakes. El Gobierno y una amplia representación de los partidos del Parlamento han alcanzado un acuerdo para poner coto a las imitaciones digitales que contengan características personales ante la creciente dificultad de distinguir entre material auténtico y manipulado. 

Así, el gobierno danés pretende modificar de la ley de derechos de autor con la intención de brindar mayores garantías. Someterá la propuesta a consulta pública antes de que concluya el verano, con vistas a que las enmiendas sean aprobadas de cara al final de este año. 

Los cambios que se aspira a incluir en la normativa se centran principalmente en reforzar a los ciudadanos en derechos de imagen y copyright sobre su propio cuerpo, rasgos y voz y brindar mayor protección contra la difusión de deepfakes sin consentimiento. Además, se contempla protección específica para artistas en lo que respecta a la difusión de imitaciones digitales realistas de sus actuaciones artísticas o representaciones sin consentimiento. 

Tal y como expresan desde el Ministerio de Cultura, que lidera la propuesta, ambas protecciones tienen como objetivo establecer una base legal clara que pueda ser utilizada por cualquier persona para eliminar deepfakes de las plataformas digitales y redes sociales. “Las normas están pensadas, principalmente, para activar el reglamento sobre servicios de medios digitales que obliga a los medios de almacenamiento a tomar medidas para eliminar contenidos ilegales”, exponen desde la cartera.

Tal y como explican, el incumplimiento de las normas propuestas no conllevará multas ni penas de prisión para las personas que difundan el contenido. Sin embargo, podría obtenerse una indemnización según las normas generales del derecho civil danés, dependiendo de las circunstancias. Además, tanto el organismo supervisor de la DSA (Ley de Servicios Digitales) como la Comisión Europea podrán imponer sanciones si el medio no cumple con sus obligaciones según el reglamento, incluyendo no responder ante una denuncia sobre contenido ilegal.

El Ministerio aclara que las normas sólo se aplican en Dinamarca, y por tanto, aunque el contenido ilegal se elimine de las plataformas en el país, aún podría estar disponible si se accede a dichas plataformas desde otros países.
El gobierno señala que la aplicación de la norma no afectará a parodias y sátiras tradicionales, que seguirán permitiéndose en el marco de la libertad de expresión. 

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Con esta propuesta, el gobierno danés busca poner límites a lo que considera que puede ser no sólo una cuestión que vulnera la identidad y la privacidad, sino también un problema democrático. Sostienen que las versiones manipuladas digitalmente de una imagen o un vídeo pueden generar una duda fundamental, e incluso una percepción completamente errónea, sobre lo que es una representación verdadera de la realidad.

“Si el contenido manipulado de audio, vídeo o imagen incluye declaraciones falsas, o si una persona imitada aparece en un contexto muy alejado de las situaciones con las que normalmente se la asocia, las imitaciones pueden convertirse, en el peor de los casos, en un verdadero problema democrático —especialmente considerando la rápida difusión del contenido en Internet”, exponen.

Jakob Engel-Schmidt, Ministro de Cultura, considera que el acuerdo lanza una señal inequívoca a los ciudadanos respecto a los derechos que tienen sobre su cuerpo, su voz y sus rasgos faciales. También considera que la propuesta es una barrera contra la desinformación y un mensaje claro para los gigantes tecnológicos. 

“Me alegra que tantos partidos del Parlamento quieran ayudar a proteger tanto a los artistas como a las personas comunes del robo de identidad digital, algo que ahora puede hacerse con unos pocos clics”; ha comentado en un comunicado. “No podemos aceptar que los seres humanos puedan ser metidos en una fotocopiadora digital y utilizados para cualquier propósito”. 

“El contenido falso e ilegal debe ser eliminado de Internet, y ahora establecemos una base legal que obliga a los medios digitales a eliminar dicho contenido antes de que se difunda”; ha señalado, por su parte, Peter Skaarup, portavoz de Demócratas de Dinamarca. “Esa es una responsabilidad que los grandes servicios digitales deben asumir, y me parece completamente razonable”. 

No obstante, algunos partidos que forman parte del acuerdo consideran que es necesario ir un paso más allá y no limitarse exclusivamente a eliminar el contenido de las plataformas. Desde Alternativa defienden que también es necesario prevenir que dicho contenido se cree en primer lugar, y sugieren una regulación efectiva de las plataformas de IA.