Comercios, ciudades y consumidores digitales: el triángulo del éxito

El entorno digital sitúa a empresas muy diferentes en el mismo plano de relación frente a los clientes. Para integrar ese nuevo modelo de relación, es necesario identificar los retos, estar preparado a nivel empresarial y activar las palancas de cambio que producen la transformación digital. Y todo ello con el cliente en el centro, para formar parte de ese ecosistema diario.

En este sentido, el comercio electrónico es la gran oportunidad para el entorno empresarial. La era digital ha sido capaz de nivelar la diferencia entre grandes y pequeñas empresas.

Y es que los clientes han cambiado sus hábitos de compra. De hecho, según Adolfo Ramírez, Director de Tecnologías de Santander España, han tenido que adaptarse a la era digital hasta las propias ciudades bajo el concepto de

Smart Cities

. Las nuevas tecnologías han impactado en los hábitos de las personas y en la propia distribución de la sociedad.

Ramírez sostiene, muy alineado sobre lo que se ha hablado estos días en el Madrid Retail Congress, que las empresas, y en concreto el sector Retail, tienen que fusionar ambos mundos para el éxito de los negocios. Hay que unir el mundo tradicional con el entorno online, tal y como sostenía Andy Stalman, para poder hablar de Brandoffon. Es decir, unir una misa marca bajo los conceptos de off y on.

Necesidades digitales

La colaboración entre comercios, ciudades y consumidores es el triángulo que debe darse en cualquier estructura para lograr un buen funcionamiento. Y, para ello, es importante entender la realidad de las nuevas tecnologías como una oportunidad que puede materializarse a través de la movilidad, la geolocalización, la presencia online, el e-commerce o la logística, entre otros.

El Banco Santander, por ejemplo, ha realizado ya varias dinámicas como Think Tank, con el objetivo de conocer de primera mano las preocupaciones que afloran a la hora de hablar de transformación digital, no sólo en un negocio o comercio, sino también en la propia ciudad.

Y es que todo, al fin y al cabo, debe buscar la adaptación a los ritmos de vida del consumidor. Pero para poder hablar de ciudad inteligente primeramente es necesario que existan comercios inteligentes con capacidad diferencial.
 
Así, el sector Retail reclama:

  • Un intercambio de experiencias con otros comercios, consultas a expertos y organismos públicos
  • Plataformas de cursos online y píldoras formativas para dar a conocer las capacidades de las nuevas tendencias y servicios online
  • Proveedores de soluciones que permitan monitorizar la actividad online y detectar oportunidades
  • Una mayor integración en todos los soportes que favorezcan la omnicanalidad

Es, de manera resumida, lo que el sector demanda para poder sumarse a este carro digital con el fin de explotar todas las vías posibles y aprovechar así todas las oportunidades que promuevan un contacto aún más directo con el consumidor digital.

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